RECOMENDACIONES A LA HORA DE CONTRATAR UN SEGURO DE VIDA
El seguro de vida es un servicio que contratamos para protegernos ante una situación adversa provocada por fallecimiento o invalidez del asegurado, para así aportar estabilidad económica a la familia.
Para ello es importante en primer lugar conocer las coberturas de este producto, saber cuáles de ellas se acercan más a nuestras necesidades y conocer su funcionamiento, ya que además de la cobertura principal que es el fallecimiento, podemos contratar otras garantías como enfermedad grave, invalidez profesional e invalidez absoluta.
- Indemnización por fallecimiento: es la garantía principal y obligatoria del seguro de vida. A esta garantía le podemos incluir la indemnización en el caso de que el fallecimiento sea por accidente. Con esto aumentaría el capital a percibir en caso de que el fallecimiento sea producido por cualquier tipo de accidente.
- Indemnización por Invalidez Profesional: es una garantía aconsejable para profesionales cuyos ingresos sean elevados y dependan de su profesión, ya que no permitiría ejercer la profesión de manera habitual.
- Indemnización por Invalidez Absoluta: limita la realización de cualquier tipo de actividad profesional, por lo que con esta garantía aseguramos el cobro de una cantidad monetaria si debido a un accidente o enfermedad no podemos realizar ningún tipo de profesión.
- Indemnización por Enfermedad Grave: esta cobertura nos asegura en el caso de que se diagnostique una enfermedad grave, como pueden ser: cáncer, esclerosis múltiple, trasplante de órganos, ictus, etc… una indemnización por los meses que se pueda estar ingresado en un hospital o con tratamientos médicos y por ello no nos permita trabajar.
A la hora de la contratación de un seguro de vida se deben valorar las circunstancian personales de cada uno para así adaptarnos a los riesgos más importantes. Por ejemplo, no es lo mismo el caso el de una persona que tenga hijos a su cargo que el de una persona que sea funcionaria del estado, ya que los riesgos son distintos y por lo tanto las coberturas pueden cambiar de uno a otro.
En el caso del fallecimiento se protege a los beneficiarios, la familia percibirá una cantidad para el posible pago de deudas pendientes, hipoteca…
En el caso de una invalidez o enfermedad grave, la indemnización protege al propio asegurado y la familia evitando así la pérdida económica y la solvencia ante nuevas circunstancias.
La duración del seguro de vida puede tener vencimientos, en el contrato se puede fijar una fecha de terminación o extinción de coberturas.
Se puede hacer un análisis para valorar la duración de un seguro de vida según las circunstancias. En el caso de querer cubrir un préstamo hipotecario asociado a la compra de una vivienda, el asegurado puede anular el seguro una vez saldada la deuda. En el caso de querer dar cobertura a la familia, al cliente le interesará que la duración sea la mayor posible.
Publicado el 25 de Febrero de 2022
Por Cristina Nogales
Responsable del Área de Seguros